E S T R É S Y REPRESIÓN

PROBLEMA QUE ENFRENTAN LOS TRABAJADORES DE PEMEX

El estrés se define como el estimulo que activa los sistemas de defensa del organismo ante una amenaza. Cualquier perturbación significativa pone en movimiento mecanismo de correlación tendientes a mantener la organización, integridad y permanencia del cuerpo afectado.

Según el XI congreso nacional de Psiquiatría legal celebrado en Oviedo, el estrés institucional es provocado por un sistema de empleo precario, temporal, de descenso de nivel de calidad de retribuciones y en constante evaluación. Todo esto conlleva a la desmotivación, inseguridad, perdida de autoestima y depresión. Esto es provocado por las reformas laborales que se ampara en la legalidad pero lleva a los trabajadores a la perdida de estabilidad emocional.

El segundo párrafo es una síntesis del documento donde se nos explican varios tipos de estrés entre ellos el estrés institucional y sin lugar a dudas es el que se viene aplicando en Petróleos Mexicanos desde 1992, cuando cambió el entorno laboral y de pronto los trabajadores petroleros por primera vez empezamos a escuchar de liquidaciones masivas, de represión contra los trabajadores y en general empezamos a sentir que por cualquier situación circunstancial o por defender nuestro trabajo podríamos ser despedidos.

Esto que se vive en Petróleos Mexicanos no es casual, este programa se aplica para la privatización de Petróleos Mexicanos; la perdida de plazas en los últimos 20 años es tremenda ya que se ha pasado de 350,000 plazas a solo 144,444 plazas (Dato de octubre del 2008), estas cifras nos indican que Petróleos Mexicanos en lugar de crecer que era la tendencia que tenía desde su creación en 1938 se ha contraído precisamente desde que entró a la presidencia Miguel de la Madrid Hurtado y empezó a aplicar el Neoliberalismo (Capitalismo Salvaje). Al contrario las compañías extranjeras se empezaron a extender en nuestro País. Pues bien, el objetivo de este escrito es hacer una observación de lo que pasa con los trabajadores de nuestra empresa, porque ahora seguido tenemos accidentes y aquí esta la respuesta. El acoso institucional aplicado sistemáticamente en Petróleos Mexicanos tiene como consecuencia que nuestra empresa sea mas insegura, veamos los siguientes puntos.

1.- Antes de 1982 en cada planta de Refinación o en cada planta Petroquímica se contaba con cinco especialistas de mantenimiento para dos plantas: Hoy en día se cuenta con cinco especialistas para un sector, los sectores normalmente se componen de cinco o más plantas de proceso, lo obvio; es que el trabajo se ha triplicado, la consecuencia: Los compañeros especialistas son esclavos, están disponibles todo el día y realizan labores de trabajo diariamente de más de ocho horas, esto contradice las horas de trabajo que se deben de realizar según la Ley Federal de Trabajo.

2.- La retribuciones cada vez son menores, ya que cuando se absorbe más trabajo solo incrementan un nivel y la carga de trabajo es mucho mayor, incluso se cubren plazas con profesionistas sindicalizados y no se les dá el nivel que les corresponde.

3.- Los mantienen con constante evaluación ya sea evaluación de desempeño, auditorias internas, auditorias externas, auditorias efectivas, auditorias de limpieza, auditorias de seguridad (SSPA) etc.

4.- Sistemáticamente se hacen reestructuraciones, donde las consecuencias son despidos masivos, jubilaciones forzadas y descensos de nivel.

5.- Se les presiona para realizar sus trabajos, pero en muchos casos no se les dan las herramientas y el material necesario para trabajar, incluso los trabajadores sindicalizados compran las cosas mas sencillas (Teflón, cintas de aislar,etc.) y los trabajadores técnicos tienen que recuperar material para llevar a cabo sus labores, lógico las gentes que implantan esta estrategia desconocen que Petróleos Mexicanos es una empresa de alto riesgo.

6.- Actualmente se ejerce presión sobre los técnicos y profesionistas para cambiarles los derechos laborales, aplicando un contrato individual de trabajo (CIT) donde el trabajador al firmar este contrato ya no tiene ni siquiera el derecho de ir a Conciliación y Arbitraje para defenderse de esta agresión, acoso institucional.

El resultado de este estrés institucional sobre los trabajadores además de provocar los daños mencionados, en nuestra empresa se ha generado inseguridad que continuamente se reflejan en accidentes.

Todo esto a pesar de haberse contratado a la empresa Transnacional DUPONT “lo máximo en seguridad Mundial” que realmente de nada a servido, solo a sido una pérdida económica cuantiosa para Petróleos Mexicanos ya que tenemos más accidentes que nunca, pues el problema realmente es provocado por estas condiciones de los trabajadores y llega hasta sus hogares provocando desintegración familiar.

Sin embargo el Gobierno actual no rectifica y a pesar del mal resultado que ha dejado a Petróleos Mexicanos su privatización en un 70% según palabras de La Secretaria de Energía, continúan aplicando esta estrategia y hace tan solo unos días el 28 de noviembre del año en curso, fueron despedidos 40 trabajadores profesionistas, los sacaron de sus oficinas los paramilitares que trabajan para nuestra empresa, sin notificación alguna y con lujo de violencia. Solo por tener la osadía de querer organizar un sindicato para defender sus derechos, Pero las autoridades argumentan que no han sido despedidos; no les permiten trabajar y por si fuera poco no reciben su sueldo.

La señal del Gobierno de Calderón es clara, con o sin Reforma la entrega de Petróleos Mexicanos a empresas trasnacionales se va A REALIZAR INCLUSIVE POR LA FUERZA.